1 calabacín
2 cucharadas de concentrado de tomate
1 cebolla
unas lonchas de jamón ibérico
lascas de queso de oveja curado
3 huevos
250 ml de nata
salvia
sal
pimienta blanca recién molida
aceite de oliva vírgen
ELABORACIÓN
Pelamos la cebolla y la picamos muy fina.
La pochamos en una sartén con aceite de oliva a fuego muy suave.
Cuando esté bien hecha la pasamos a un bol con una cucharada de tomate concentrado y trituramos bien. Añadimos la nata y los huevos y batimos de nuevo. Salpimentamos y reservamos.
Lavamos el calabacín, lo cortamos por la mitad y luego en rodajas finas. Los salteamos en una sartén con unas gotas de aceite de oliva. Sacamos y reservamos.
Troceamos el jamón y lo reservamos.
En un molde de madalenas, flan o tartera si se prefiere hacer un pastel grande, colocamos en el fondo un poco de calabacín reservado. Encima el jamón y repartimos la otra cucharada de concentrado de tomate. Esparcimos las hojas de salvia. Colocamos la mitad de las lascas de queso. Repartimos el resto del calabacín y el queso. Vertemos la mezcla preparada de nata y huevos.
Llevamos al microondas unos 12-15 minutos a potencia media o al horno unos 20-25 min a 180º. Podemos pinchar con un palito de brocheta para comprobar que están hechos.
Sacamos y dejamos enfriar.
PRESENTACIÓN
En un plato colocamos uno o dos pastelitos por ración. Acompañamos con unas hojas verdes, rúcola en este caso y aceite de albahaca.