La marca Sabor a Málaga se presenta en Valencia
con sus productos más característicos
Nadie a estas alturas duda de la generosidad que desde un punto de vista gastronómico brinda la provincia de Málaga, un lugar que desde tiempos inmemoriales ha ofrecido productos autóctonos que embelesan a propios y extraños por su gran calidad y presencia.
Entre ellos, destacan los aceites de oliva virgen extra, los aguacates y las aceitunas, las almendras, carnes, pescados y mariscos, los quesos artesanos, las castañas y las cerezas, los vinos con Denominación de Origen Málaga y Sierras de Málaga, así como otras muchas delicias que convierten a esta privilegiada provincia andaluza en un remanso de intenso placer gustativo para aquellos que aman las cosas realmente buenas de la vida.
Entre ellos, destacan los aceites de oliva virgen extra, los aguacates y las aceitunas, las almendras, carnes, pescados y mariscos, los quesos artesanos, las castañas y las cerezas, los vinos con Denominación de Origen Málaga y Sierras de Málaga, así como otras muchas delicias que convierten a esta privilegiada provincia andaluza en un remanso de intenso placer gustativo para aquellos que aman las cosas realmente buenas de la vida.
Para salvaguardar la riqueza agroalimentaria de Málaga, se creó en el 2011 la marca Sabor a Málaga con la idea de aunar los productos más notables de la provincia para que el consumidor no tuviera ningún problema en identificarlos. La marca se dedica también a impulsar la comercialización de estos alimentos, poniendo especial énfasis en la calidad y en su relevancia. Por otra parte, Sabor a Málaga contribuye a dinamizar la economía local y a crear puestos de trabajo en el sector de la agricultura, de la pesca y de la alimentación.
Sabor a Málaga es una idea conjunta de la Diputación de Málaga, junto a más de 400 empresas de la provincia, para dar a conocer en España y en el resto del mundo la galanura alimentaria de una provincia que destaca por su gastronomía y por sus incontestables alicientes turísticos.
Así pues, el pasado viernes 16 de febrero, Sabor a Málaga congregó a un importante grupo de periodistas y blogueros valencianos relacionados con el mundo de la gastronomía para dar a conocer sus productos en una comida que se celebró en el restaurante Vincci Palace Hotel, ubicado en el Carrer de la Pau, 42 de la ciudad del Turia. En el acto estuvieron presentes el diputado Jacobo Florido, el periodista valenciano afincado en Málaga Enrique Bellver así como representantes de las bodegas.
Un menú confeccionado y realizado de manera acertada y ciertamente imaginativa por Sergio Garrido, jefe de cocina del céntrico Hotel Vincci Posada del Patio de Málaga. Propuesta que fue maridada con una interesante cerveza artesanal ecológica elaborada en Ronda denominada Puente Nuevo y con vinos malagueños de las bodegas Cortijo La Fuente, en Mollina, Excelencia Bodegas y Bodegas Lunares, ambas de Ronda. En este sentido, Florido destacó la calidad de los vinos con ‘Sabor a Málaga’ que ostentan más de una veintena de premios nacionales e internacionales y recordó que en la mejor feria de vinos de España, Fenavin 2017, obtuvieron dos medallas de bronce.
Además, los presentes al acto gozamos con la presencia y buen sabor de tres reputados y premiados aceites de oliva virgen extra de Málaga: Molisur, Finca La torre Selección y La Laguna Fuente Piedra. Todos ellos de buen sabor, afrutados y gentiles.
El menú de Sergio Garrido nos trasladó sensorialmente a Málaga en un original itinerario que comenzó con un Tartar de salchichón malagueño sobre migas de sopa Perota. El salchichón malagueño es un producto autóctono de la provincia que no existe en otro lugar, un embutido con una curación exigua que se consume prácticamente crudo, y que a mi personalmente, tal y como lo preparó Garrido, me recordó al sabor del carpaccio italiano. Un plato brillante que lucía gracias al acompañamiento de las migas, la frescura que le aportaba el caviar de melón y la intensidad de la notable aceituna de la localidad de Álora que venía en forma de esferificación.
El menú prosiguió con un Pulpo frito, caviar de vino Málaga y Miel de caña de Frigiliana. No estamos acostumbrados a tomar el pulpo en Valencia tan al dente, pero me agradó, las pequeñas y placenteras explosiones del caviar de vino de Málaga en el interior de la boca casaban muy bien con el sabor pleno a mar del octópodo. El conjunto quedaba suavizado con la inclusión de la miel de caña de Frigiliana, localidad malagueña situada en la comarca de la Axarquía, la región más oriental de la provincia, donde se produce una miel de caña única, herencia de los árabes que habitaron durante siglos en al-Ándalus, quienes introdujeron el cultivo de la caña de azúcar en la Península Ibérica.
Sergio Garrido demostró valentía y desparpajo con el siguiente plato: Arroz señorito con Gambas de Málaga y caldillo de Pintarroja. Y lo digo porque presentarse en Valencia y cocinar una paella no lo hace cualquiera y es de tener redaños, pues si en algo podemos llegar a ser condenadamente pejigueros los valencianos es cuando nos presentan delante de nuestros ojos una paella diferente.
Debo decir que el resultado fue brillante, pues para empezar el arroz venia al dente y además al probarlo se detectaba inmediatamente que el fondo de pescado tenía intensidad y sabrosura, el umami perfecto que dirían los japoneses. Además, este arroz incluía uno de los productos estrella de Málaga, la gamba blanca de Fuengirola, que resalta por su delicadeza y buen sabor. Pero quizás, lo más interesante fuera la inclusión del caldillo de Pintarroja, menos picante y más denso de lo habitual, una preparación típicamente malagueña, un caldo creado hace mucho tiempo por los pescadores de la zona para calentar los huesos antes o después del duro trabajo en la mar, que los malagueños toman asiduamente para entonar el cuerpo y que se elabora con la Pintarroja, un pequeño tiburón que se pesca en sus costas, que resulta ideal para preparar adobos y guisos marineros gracias a su carne blanca y textura gelatinosa.
Antes del postre, disfrutamos de: Ropa Vieja de chivo lechal malagueño. Una recreación de un plato típico en el que los presentes nos deleitamos con el Chivo Lechal Malagueño, un producto desconocido por estos lares que es una maravilla gastronómica y que es la primera carne caprina española asociada a una marca de calidad.
Por último, disfrutamos con la Torrija al vino reinterpretada por Garrido, un dulce típico de la Cuaresma malagueña.
Sabor a Málaga, en su ya habitual cita en Valencia, volvió a convencernos a todos de las enormes cualidades organolépticas de los productos agroalimentarios de una noble tierra que les recomiendo fervorosamente.