CALAMARES SALTEADOS CON VINO, SOJA Y REDUCCION DE VINAGRE DE FRAMBUESA


Compartimos en la sección LAS RECETAS DE LOS BLOGUEROS esta deliciosa receta de Chez Silvia. Una deliciosa combinación de sabores, rápida y sencilla de preparar. Acompañada de un arroz blanco, la podemos convertir en una comida o cena completa.

CALAMARES SALTEADOS AL VINO, SOJA Y REDUCCIÓN DE VINAGRE DE FRAMBUESA




A veces en el congelador tengo puntas de calamares cortadas que guardo a propósito para futuras recetas, no son grandes cantidades, pero me dan para un arroz para dos personas, para añadir en algún guiso, etc, en este caso, los hice muy rápido, se me tiró la mañana encima y no me acordaba que mi hija en una hora y medía se presentaba a comer.

Un rato encima de la encimera y un chorro de agua fría rápido fueron lo suficiente para ayudarlos a descongelar.

Muy sencillos pero sabrosos en gusto, me arreglaron este segundo plato.


INGREDIENTES
puntas de calamar y algún calamar pequeño cortado a rodajas
aceite
un vasito de vino blanco dulce (*)
perejil picado
dos cucharadas soperas de salsa de soja baja en sal 
dos cucharadas soperas de reducción de vinagre de frambuesa. 


ELABORACIÓN

Calentar un poco de aceite en una sartén y poner los calamares que se vayan pochando, como irán desprendiendo algo de agua, dejaremos que se vaya evaporando, podemos ir de manera más rápida subiendo la intensidad del fuego, vigilando que no se quemen.

Añadir el vino blanco y dejar reducir, a continuación añadir la salsa de soja y la reducción de vinagre balsámico, la salsa de soja y el vinagre caramelizaran los calamares. Rectificar de sal si hace falta y espolvorear con perejil picado.

Si son muy tiernos es 15 minutos estarán cocinados. 

 

(*) En muchas recetas utilizo un vino dulce que normalmente se bebe acompañado de foie, es vino Sauternes, pues de este vino tengo como 7 botellas, que a veces si que acompañamos con el foie, pero tampoco comemos foie cada día!!!, el motivo de mi buen stock es un cliente de mi marido que vive en Francia, se debe creer que nos lo ventilamos como el que bebe cava o vino negro y cada vez que se ven le regala alguna botella, pues decidí en su día aprovecharlo en risottos, salteados de marisco y pescados, y aunque lo pongo en cantidades pequeñas le da un sabor a los platos, con un puntito dulce que me gusta mucho.