ENSALADA TEMPLADA DE GAMBAS Y PUERROS
Ya han pasado las Navidades, es verdad, pero no he podido resistirme a publicar esta receta. La preparó nuestra madre el día de Nochebuena. Iba a ser un entrante, pero gustó tanto, que repetimos y se convirtió casi en "el plato" de la cena. Templada, sabrosa, y contundente. Es muy sencilla de preparar, y el resultado vale la pena.
No sé de dónde sacó la receta, pero le aportó un aliño con las cabezas de las gambas que le da justo el sabor que hizo que nos encantara. Será amor de madre, pero tiene muy buena mano para la cocina!
La preparó con gambas, pero se pueden sustituir por langostinos, langosta, cangrejo,... según el gusto, y el bolsillo.
Aunque la preparó para estas fiestas, seguro que en cualquier otra ocasión puedes prepararla y sorprender a tus invitados. Como en unos días es mi cumpleaños, la prepararé para celebrarlo!
INGREDIENTES (4 personas)
16 a 20 gambas
1 puerro
125 ml de nata para cocinar
aceite de oliva
1 tomate de ensalada
1 ajo pequeño
1/2 vasito de coñac
brotes de alfalfa o cualquier germinado que os guste
pimienta negra o blanca recién molida
sal
ELABORACIÓN
Primero preparamos las gambas. Las pelamos reservando las pieles y las cabezas. Los cuerpos los salamos y salteamos en una sartén con unas gotas de aceite, lo justo para que se hagan, así quedarán más sabrosas. Las sacamos y las reservamos.
Preparamos los puerros. Para ello, cortamos la parte verde y la base para quedarnos sólo con lo blanco. Quitamos la primera capa (y la segunda, si hace falta), lavamos bien en agua para quitarles la tierra, los secamos y los cortamos en rodajas finas. Pelamos y picamos el ajito.
En la misma sartén donde hemos salteado las gambas, ponemos un poco más de aceite y salteamos el ajo y los puerros a fuego suave hasta que queden pochados. Salpimentamos y añadimos la nata, reducimos hasta que quede una masa espesita. Reservamos.
Salteamos las cabezas y las pieles de las gambas en una sartén con aceite de oliva, removiendo y aplastando las cabezas para que suelten todo su jugo. Añadimos en coñac y flambeamos (o dejamos reducir, que el fuego da mucho respeto). Salpimentamos, pasamos todo por un colador, añadimos más aceite de oliva, batimos y reservamos.
Pelamos el tomate, quitamos las semillas y lo cortamos en daditos. Los salamos y reservamos.
Antes de montar el plato, templamos los puerros y las gambas, si se han quedado muy fríos.
PRESENTACIÓN
La mejor forma para presentarlo es ayudarnos de un aro de cocina, de la forma que nos guste. En la base del aro colocamos los puerros, luego los dados de tomate, y terminamos añadiendo con cuidado, las gambas. Quitamos el aro con cuidado, para que mantenga la forma.
Encima de las gambas colocamos unos brotes de alfalfa.
Añadimos un poco del aliño preparado y el resto en una salsera aparte.
Terminamos con unas gotas de aceite de oliva y un poco de pimienta recién molida.
Servimos templada.
Buen provecho, y buena compañía!!